El caso se inició a raíz de la denuncia realizada por el entonces titular de la AFIP, Ricardo Echegaray y presentada en 2014, contra distintos integrantes del directorio quienes presuntamente habrían organizado un "medio paralelo, clandestino y antirreglamentario de actividad bancaria, destinado a canalizar riquezas de determinados clientes de elite".